Infierno en tiempos de coronavirus
Y, de repente, descubrí que el infierno es real y que, sin poder evitarlo, estoy en él.. un mundo en el que no puedo abrazarte.
Un mundo en el que el mas ligero roce podría hacernos daño, llevarnos a una cama de naturaleza totalmente distinta a la que hubiera podido desear.. un mundo en el que un pequeño beso en la mejilla podría ser mortal.
No abrazarte, no rozarte, no besarte... es como pedirle a la lluvia que no te toque, al viento que no te envuelva, al sol que no te caliente. Penitencia cruel esta que pago como castigo por vaya usted a saber cuál de mis pecados..
Ni siquiera Dante tuvo la locura de pensar jamás en un anillo para este moderno infierno en tiempos de coronavirus..
Un mundo en el que el mas ligero roce podría hacernos daño, llevarnos a una cama de naturaleza totalmente distinta a la que hubiera podido desear.. un mundo en el que un pequeño beso en la mejilla podría ser mortal.
No abrazarte, no rozarte, no besarte... es como pedirle a la lluvia que no te toque, al viento que no te envuelva, al sol que no te caliente. Penitencia cruel esta que pago como castigo por vaya usted a saber cuál de mis pecados..
Ni siquiera Dante tuvo la locura de pensar jamás en un anillo para este moderno infierno en tiempos de coronavirus..
Publicar un comentario
Hola... deja tu comentario aqui. No permito ni favorezco intercambio o descarga alguna de audios o videos. Cualquier comentario relacionado con este aspecto será eliminado de inmediato y sin aviso.
Cuaquier comentario soez y ofensivo correrá el mismo destino.